La fiscalía imputó al médico ginecólogo Marcelo Cornejo y a un técnico en identificación, por los delitos de falsificación de instrumento público e incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos. Estas personas están acusadas de haber falsificado los documentos que aseveran que el feto fue expulsado con vida en el contexto de la práctica médica que acompañó Miranda Ruiz, hoy criminalizada por haber garantizado un aborto legal en el marco de la Ley 27.610.
El hecho del que se desprenden las imputaciones es la manipulación del certificado de identificación, en el que el médico ginecólogo dictó datos falsos para MENTIR sobre la vitalidad del feto, indicando FALSAMENTE que había sido expulsado con vida. Este hecho ya fue aclarado por el propio gerente del hospital, quien confirmó que el feto fue expulsado sin vida. Esta situación constituye una muestra más del entramado perverso que subyace en la causa.
El documento falsificado por Cornejo va a tono con las mentiras que escriben y difunden el abogado de Marcelo Cornejo, Subelza, Fiore, la acusación de los familiares, y el diario El Tribuno de Tartagal. No hay en la causa NINGÚN testimonio que indique que el feto nació con vida. De esta manera pretenden ensuciar a la persona de Miranda y desacreditar su accionar profesional, buscando generar una opinión pública en su contra y presionar a la Justicia.